English tea, el consumo del té en Inglaterra

Cómo comenzó el consumo de té en Inglaterra

El consumo de té en Inglaterra comenzó en el s. XVII debido a la predilección que sentía por él la esposa del rey Carlos II: Catalina de Portugal, sin embargo su elevado precio hacia que solo fuera empleado por las clases adineradas. Pero la costumbre del ritual de las 5 fue establecido por la duquesa de Bedford ya en el s. XIX, y no parece obedecer a una simple ocurrencia, sino que el tiempo que mediaba entre las dos comidas importantes: el desayuno al despertar y la cena al anochecer era demasiado prolongado; así tomar una especie de merienda a base de sándwiches y pastas permitiría saciar el apetito, acortando la espera hasta la cena.

En tiempos de la reina Victoria este AFTERNOON TEA, se popularizó entre la aristocracia británica en un primer momento, y más tarde en la burguesía e incluso a la clase obrera, hasta constituirse en una costumbre tradicional inglesa.

Dónde se origino esta costumbre

No parece que esta costumbre fuera original de Inglaterra, puesto que en el siglo XVIII en Francia en ambientes aristócratas también existía la costumbre de ofrecer una merienda a los invitados, si bien no era privativo el té pues también podía degustarse chocolate o café; la revolución francesa desterró esta costumbre y no fue hasta el siglo XIX cuando volvió a instituirse para imitar a los británicos.

Cuál es el té más consumido en Inglaterra

El té que más se consume es el té negro con mezclas, denominadas blend, sobre todo de Ceylán y Assam. Son muy conocidos el Darjeeling, Earl Grey y sobre todo el English Breakfast tea utilizado en el desayuno.

El sabor de esta bebida va a depender de: la manera en que es cosechado y la cantidad de luz que recibe en el proceso, así para conseguir el sabor del té verde deben protegerse las hojas de la planta de la luz. Su característico sabor amargo se debe a la ausencia de luz solar que produce un aumento de clorofila y disminución de polifenoles.

El tiempo de secado al sol determinará el tipo de té, así será breve para el té verde, mientras que el negro debe permanecer secándose al sol durante largo tiempo antes de ser infusionado.

Según el momento en que se toma el té se denomina de distinta manera: breakfast tea en el desayuno, five o´clock tea, afternoon tea, high tea (después de cenar).

Elaboración del té

Los pasos de elaboración son cuidadosos: debe hervirse el agua y calentar la tetera con una pequeña cantidad, colocar el té en su interior (nunca debe ser en bolsitas) y rellenarlo con la cantidad de agua hervida necesaria según la cantidad de tazas a preparar. El tiempo de reposo variará según el gusto de los invitados. En ocasiones puede cubrirse la tetera para mantener el calor.

Sobre las tazas se coloca un filtro para evitar restos.

Lo indicado es utilizar un servicio de porcelana, tetera y taza con platillo. Antiguamente se tomaba el té vertido en el platillo desde la taza para que se enfriase. Hoy en día es impensable.

Si no queremos llamar la atención, al ser una ceremonia tan exclusiva hay que evitar errores como mojar las pastas en el té; es conveniente tomar el platillo con la mano izquierda y el plato con la derecha degustarlo en pequeños tragos.

Sin duda los beneficios del consumo de té son muchos: digestivos, antioxidantes, estimulantes… pero hay que valorar también su función social, como motivo para reunirse, relacionarse.

Numerosos estudios determinan que la cultura particular de los grupos es la que determina la importancia de lo que comemos y bebemos. Kate Fox, antropóloga, en su libro «observando a los ingleses», analiza la relación de los británicos y su manera de consumir el té, y extrae algunas conclusiones curiosas: que cuando un inglés se encuentra en una situación complicada o se encuentra incomodo tendería a prepararse un té.

La costumbre del té en Inglaterra

Podemos encontrar diferencias sociales en el consumo del tea: así la clase trabajadora consume preferentemente el té de sabor más fuerte, te negro, y a medida que se alcanza un estatus más elevado los tés preferidos son más suaves. Otro importante tema de debate es el uso de azúcar y la leche, que para muchos identificaría a la gente de clase baja, llegando a hablar del té de obrero.

Hoy en día estos horarios no son tan estrictos y el ritual del famoso té de las 5 ha quedado relegado prácticamente al turismo y celebraciones especiales que tienen lugar en exclusivos hoteles o lujosas teterias, mientras que el resto de la población lo pueden consumir a cualquier hora.

Aunque la costumbre de este té de las 5 esté algo olvidada, si viajamos a Inglaterra, nada como disfrutar de su famoso five o´clock tea , en hoteles como el Ritz, el Claridge ….para transportarnos a la época victoriana y sentirnos como auténticos aristócratas, el sacrificio vale la pena.